Las tarjetas departamentales son productos financieros que otorgan las tiendas departamentales, su uso es exclusivo para productos dentro de la tienda y ofrecen facilidades para las compras como meses sin intereses, pagos fijos y descuentos.

Las tarjetas departamentales son medios de pago para la compra a crédito de productos diversos que se venden en cada una de las tiendas. El uso de estos plásticos está sumamente extendido en México. Según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera realizada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el INEGI, 7 de cada 10 mexicanos que utilizan tarjetas de crédito cuentan con un tarjeta departamental para hacer sus compras.

Este tipo de financiamiento es muy útil cuando eres cliente fiel de una tienda. Si te gustan sus productos, sueles ir a comprar y buscas una manera de poder acceder a productos de altos costos, estos plásticos te servirán al momento de hacer tus pagos.

Además, las tarjetas departamentales también pueden entregarte dinero en efectivo, poseen programas de cashback y beneficios únicos. Aunque las características de cada tarjeta departamental dependerán de la tienda que te ofrezca el producto.

Asimismo, los requisitos para solicitarlas varían de una tienda a otra. No obstante, una característica común es que suelen tener pocas exigencias a la hora de solicitar documentación y otros requerimientos para conseguirlas. Por ejemplo, la mayoría de ellas no exige contar con un historial crediticio para su otorgamiento.

También, existen algunos plásticos que forman parte de la red Visa o MasterCard. Por lo tanto, estos pueden ser utilizados fuera de las tiendas (tanto en México como en el extranjero) como cualquier otra tarjeta de crédito.

Las tarjetas departamentales tienen muchas ventajas. Sin embargo, existen algunas diferencias con las tarjetas de crédito bancarias que deberás conocer para saber aprovecharlas a tu favor. ¡Sigue leyendo para saber de qué se tratan!

Las tarjetas departamentales tienen particularidades que deberás conocer si decides solicitar una para la compra a crédito en tu tienda favorita.

Para empezar, estos plásticos no son otorgados por un banco, si no que son productos financieros exclusivos de las tiendas departamentales. Por lo tanto, sus reglas son distintas y sus características también.

Te contamos todo, a continuación.

Una de las características más importantes de las tarjetas departamentales es que sus costos son mucho mayores que los de una tarjeta de crédito bancaria.

¿Qué significa esto? El Costo Anual Total (CAT) de una tarjeta departamental en promedio es del 100%. Esto es mucho más caro que el costo que manejan las tarjetas de crédito en México. Según los datos de Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), las tarjetas de crédito tiene un CAT promedio del 40%

El CAT es una medida estandarizada del costo de financiamiento de un producto financiero (tarjeta de crédito, préstamo o crédito). Esta cifra se expresa en términos porcentuales anuales e incorpora la totalidad de los costos y gastos de los créditos que otorgan las instituciones.

El CAT incluye elementos como la tasa de interés, anualidad o comisiones y permite comparar diferentes opciones de crédito, independientemente del tipo o plazo, con el objetivo de que los usuarios tomen mejores decisiones respecto al costo del financiamiento que están buscando. De esta manera, el principal objetivo de este número es ayudarte a comparar entre productos financieros.

Otra de las diferencias que debes conocer entre estos plásticos y los emitidos por entidad bancarias, es que la tasa de interés que manejan es mucho mayor.

Por lo tanto, nuestra sugerencia es que aproveches las facilidades para la compras que te ofrecen estos plásticos con los programa de meses sin interés. Este es un gran recurso que te permitirá comprar sin pagar las altas tasas de interés que manejan estos plásticos.

También, las tarjetas departamentales te ofrecen pagos fijos de pequeñas cantidades para tus compras que puedes utilizar. Aunque, muchas veces, esta forma de pago pueda hacerte pagar un producto por mucho, mucho tiempo. Quizás demasiado.

El problema de este tipo de financiamiento es que si te olvidas de pagar, te cobrarán altas comisiones.

Aunque las tarjetas departamentales no sean emitidas por entidades bancarias, las tiendas pueden utilizar diferente tipo de recursos para lograr que pagues tus deudas.

Esto significa que, así cómo las tarjetas de crédito bancarias, tus deudas pueden traerte muchos problemas si no pagas responsablemente.

Por ejemplo, si tu deuda crece y no haces tus pagos, posiblemente la tienda envíe tus datos a un despacho de cobranza. De esta manera, comenzarás a recibir llamadas telefónicas y pedidos de pago de forma sistemática.

Además, los despachos de cobranza tienen la facultad de hacer embargos. Por lo que tus bienes pueden peligrar, si tus deudas crecen.

La consecuencia más importante que tendrás será que tu comportamiento de pago será reportado al Buró de crédito. Esto puede que no te parezca relevante. No obstante, aparecer con un score negativo en esta entidad, puede hacer que te denieguen préstamos, créditos e hipotecas en el futuro.

En cualquiera de los casos, siempre puedes acudir a la autoridad de aplicación que supervisa este tipo de productos. En el caso de las tarjetas departamentales, el organismo es la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO).

Otra de las diferencias con las tarjetas de crédito que emiten las entidades bancarias, es que estos plásticos no cuentan con seguros asociados. De esta manera, no tendrás seguro de compras, seguros de viaje o asistencia.

Tampoco, tendrás un seguro que cubra el saldo de la misma en caso de fallecimiento. Por lo general, las tarjetas departamentales brindan un servicio restringido a la tienda que las provee. Con excepción, de las avaladas por Visa y MasterCard, donde tendrás la posibilidad de acceder a los seguros que proveen estas compañías.

¿Cuándo puedes sacarle provecho a tus tarjetas departamental? Los mayores beneficios de estos plásticos están en las facilidades que ofrece para el pago de tus compras en meses sin intereses, los descuentos que realiza, las ventas exclusivas y los programas de cashback, entre otros.

De esta forma, el mayor provecho los sacarás dentro de la misma tienda. Por lo que te aconsejamos, solicitar la tarjeta departamental de la tienda que eres fanático.

Así, podrás comprar en 6, 12 o 18 cuotas algunos productos de alto costo, sin pagar los altos intereses que estas tarjetas manejan. También, podremos conseguir el reembolso de un porcentaje de nuestro dinero a través de los programas de cashback. Algo que nos servirá para reutilizar en la misma tienda, pagar nuestro saldo o retirar en efectivo.

Por último, las tiendas departamentales suelen establecer descuentos exclusivos para su comunidad de clientes. Por lo tanto, tener el plástico de tu tienda favorita te permitirá acceder a importantes bonificaciones y descuentos.

Este es otro de los beneficios de las tarjetas departamentales y, quizás, uno de los que las vuelven tan populares. Los requerimientos para solicitar este producto financiero son mínimos. Es más, muchos de estos plásticos pueden ser contratados sin contar con un historial crediticio.

En cuanto al resto de los requerimientos, estos son: Tener entre 18 y 70 años, contar con ingresos mínimos mensuales de entre $2,500 y $5,000, tener un comprobante de domicilio y una identificación oficial vigente.

Las tarjetas departamentales están muy extendidas en México y muchas tiendas cuentan con este tipo de solución financiera.

Algunas de tarjetas departamentales son: Tarjeta Departamental Liverpool, Tarjeta Departamental Palacio, Tarjeta Departamental Sears, Tarjeta Departamental Sanborns, Tarjeta Departamental Suburbia, Tarjeta Departamental C&A, Tarjeta Cimaco, Tarjeta Socio El Palacio de Hierro,

Tarjeta Fábricas de Francia, Tarjeta Suburbia Bancomer, Tarjeta De Crédito Gran Chapur.

Para solicitarlas, puedes acceder a las páginas Web de las tiendas. Muchas de ellas, pueden ser contratadas de manera online.